NUESTRA HISTORIA
Así empezó todo...
Soy Cris, ingeniera de formación y pastelera-creativa por pasión. Desde niña, me fascinó todo lo relacionado con la creatividad. Y el día que dejé mi querida Málaga y me fui a vivir sola a Barcelona sin las comiditas de mamá, descubrí mi otra pasión, la cocina.
Después de dar tumbos por esos mundos ingenieriles, rodeada de calderas y máquinas de clima, llegué a la conclusión de que solo puedes ser bueno, haciendo aquello que te hace inmensamente feliz, y lo que a mí me gustaba, estaba muy lejos de aquel mundo. Así que con mi master en dirección de empresas debajo del brazo y un montón de cursos y formación en pastelería, me senté delante del ordenador a dar forma a un proyecto que con el tiempo se ha transformado, junto a mi hijo Marc, en mi vida.
Es por esto que Be Delight, además de ser una empresita, es un proyecto de vida, un concepto romántico que sobre todo nos hace felices a todos aquellos que trabajamos aquí. “Hecho con cariño”, por supuesto que no somos perfectos, pero a lo que hacemos le ponemos todo el amor y el buen hacer que podemos.
Es por esto que de Be Delight, no sólo salen cupcakes deliciosos (ojo que ayer una persona especial me sugirió hacer firmar un documento a nuestros clientes por la adicción que pueden crear) o unas tartas espectaculares.
De Be Delight, en cada bolsa, en cada caja os lleváis un trocito de cada uno de nosotros. Espero de corazón que lo disfrutéis muchísimo.
Cristina Pedraza